El pastel de acelgas y repollo es una opción económica, ligera y saludable, ideal para el verano. Hecho con dos verduras que se complementan perfectamente, es rico en fibra, vitaminas y minerales que fortalecen el sistema inmunológico y ayudan a la pérdida de peso. Una porción cubre las necesidades diarias de nutrientes esenciales. Además, puede disfrutarse caliente o frío y se conserva bien en la nevera, siendo una delicia en cualquier momento.

Preparación

  1. Para la masa, unir todos los ingredientes hasta formar una masa suave y elástica.
  2. Hervir las hojas de acelga en una olla con abundante agua y sal durante cinco minutos. Escurrir muy bien y picar.
  3. Picar las cebollas, el pimiento y el repollo finamente y rehogar en una olla con aceite hasta que el repollo esté tierno
  4. Agregar la acelga y una pizca de nuez moscada. Salpimentar al gusto.
  5. Precalentar el horno a temperatura media.
  6. Dividir la masa en dos bollos iguales. Estirar cada uno dándole forma redonda, del mismo diámetro del molde a usar.
  7. Engrasar el molde y forrar con un disco de masa, presionando los bordes.
  8. Rellenar con el sofrito de verduras. Colocar los huevos duros cortados en rodajas encima. Si se desea, agregar queso mozzarella o parmesano rallado.
  9. Cubrir con el otro disco de masa. Sellar los bordes con un tenedor. Pincelar la superficie con huevo batido y leche.
  10. Hornear el pastel de acelga y repollo hasta que se vea dorado.